Normativa y Reglamento

Cómo proteger legalmente tu empresa de mantenimiento PCI: 8 riesgos reales que puedes evitar

Aunque cumplas con el RIPCI y hagas correctamente el mantenimiento de los sistemas de Protección Contra Incendios (PCI), tu empresa sigue expuesta a riesgos legales si no dejas constancia clara de lo que haces, de lo que recomiendas… y de lo que el cliente decide no hacer. En este artículo repasamos los riesgos legales más frecuentes para una empresa mantenedora PCI en 2025 y cómo puedes protegerte en cada caso con procedimientos, documentación y herramientas adecuadas.
July 3, 2025

Riesgos legales de los que debe protegerse una empresa mantenedora PCI

Aunque estés al día con toda la normativa que afecta al mantenimiento PCI, eso no te exime de asumir riesgos legales si no gestionas correctamente lo que escapa a tu control: decisiones del cliente, fallos no reparados, documentación incompleta, o incluso interpretaciones erróneas de tus responsabilidades.

A continuación, repasamos los escenarios más comunes que pueden comprometer legalmente a una empresa mantenedora y cómo anticiparse para evitar sanciones, reclamaciones o problemas con aseguradoras.

1. Cómo protegerte si el cliente rechaza una reparación crítica

Cuando detectas una anomalía grave durante una revisión (por ejemplo, un sistema fuera de servicio o un componente esencial averiado) y el cliente se niega a repararlo o lo pospone indefinidamente, tu empresa puede quedar expuesta si más adelante ocurre un incendio o una inspección que derive en sanción. Aunque no seas responsable directo del fallo, podrías ser señalado si no has documentado adecuadamente la situación y las advertencias realizadas.

Cómo protegerse:

2. Qué hacer si el cliente no firma las revisiones PCI

En ocasiones, tras realizar una revisión o emitir un informe de incidencias, el cliente no firma el parte de actuación o simplemente no responde. Si no puedes acreditar que esa información le fue entregada o que rechazó una intervención propuesta, quedarás en una posición débil ante una posible reclamación, incluso si actuaste correctamente.

Cómo protegerse:

  • Puedes utilizar la firma digital en cada visita, ya sea mediante tablet o móvil, para dejar constancia inmediata y vinculante.
  • Si no es posible, envía los documentos mediante canales con trazabilidad como correo electrónico con acuse de recibo o mediante una plataforma de gestión documental que registre el acceso o la descarga (como Cofrai).

Estos sistemas no solo respaldan tu trabajo, sino que acreditan que el cliente fue debidamente informado y que la empresa cumplió con sus obligaciones.

3. Falsas expectativas del cliente sobre el alcance del mantenimiento

Es habitual que algunos clientes interpreten que disponer de un contrato de mantenimiento implica que el sistema PCI está garantizado en cualquier circunstancia, aunque existan limitaciones técnicas, equipos obsoletos o zonas no incluidas en el alcance del servicio. Esta falta de comprensión puede generar conflictos si ocurre un fallo o una inspección y el cliente considera que la responsabilidad es del mantenedor.

Cómo protegerse:

Redacta un contrato de mantenimiento claro y detallado, en el que se especifique:

  • Qué sistemas están incluidos y cuáles no
  • Qué servicios se prestan (preventivo, correctivo, atención de urgencias, etc)
  • Qué ocurre si el cliente no ejecuta las recomendaciones técnicas
  • Las exclusiones de responsabilidad en caso de falta de actuación por parte del titular

Una correcta redacción del contrato es clave para delimitar obligaciones y protegerte ante reclamaciones infundadas. Puedes ayudarte de nuestra guía completa: Cómo redactar un contrato de mantenimiento para PCI

4. Errores del propio técnico mantenedor

Una revisión incompleta, la aplicación incorrecta de una norma UNE o la falta de formación técnica específica pueden dar lugar a errores que derivan en sanciones, pérdida de habilitación o incluso en reclamaciones por daños. Aunque sean fallos involuntarios, la empresa mantenedora es responsable de las actuaciones de su personal técnico.

Cómo protegerse:

Establece un protocolo de auditorías técnicas internas periódicas para supervisar la calidad y conformidad de las actuaciones.

5. Uso indebido o manipulación del sistema por parte del cliente

En algunos casos, tras una revisión correcta, el cliente puede desactivar equipos, mover extintores, bloquear salidas o manipular componentes del sistema PCI, dejando la instalación en un estado no conforme. Si posteriormente ocurre una emergencia o inspección, la responsabilidad puede recaer sobre la empresa mantenedora si no ha dejado constancia de esas alteraciones.

Cómo protegerse:

  • Registra cualquier uso indebido o manipulación detectada durante la revisión en el informe técnico.
  • Añade fotos como evidencia, especialmente si se trata de elementos desplazados, accesos bloqueados o instalaciones alteradas.

Incluye advertencias explícitas en los informes y certificados, indicando que el funcionamiento correcto del sistema depende de su uso adecuado y mantenimiento conforme a lo indicado.

6. Falta de cobertura por el seguro de responsabilidad civil

Aunque el RIPCI no exige expresamente disponer de un seguro de responsabilidad civil, algunas comunidades autónomas sí lo requieren como parte del proceso de inscripción o mantenimiento en el registro de empresas instaladoras o mantenedoras, especialmente cuando se trabaja en entornos industriales o con administraciones públicas. Además, puede darse el caso de que ciertos clientes lo exijan como requisito contractual.

Trabajar sin una póliza adecuada puede dejarte desprotegido ante reclamaciones por errores técnicos, defectos en el mantenimiento o inspecciones desfavorables. Incluso si actúas conforme a la normativa, puedes tener que afrontar costes legales o indemnizaciones si no estás cubierto.

Cómo protegerse:

  • Revisa tu póliza con un corredor especializado en actividades PCI, que conozca los riesgos concretos del sector y las coberturas necesarias.
  • Comprueba que incluye:

    • Responsabilidad civil profesional por errores técnicos u omisiones
    • Defensa jurídica frente a reclamaciones de clientes o inspecciones
    • Cobertura retroactiva, por servicios prestados en el pasado
    • Cobertura para instalaciones industriales o de riesgo especial

Además, asegúrate de tener bien documentadas todas tus actuaciones, ya que la aseguradora podrá exigir evidencias en caso de siniestro.

7. Problemas con la documentación legal o técnica

Durante una inspección, auditoría o reclamación legal, es habitual que te soliciten documentación que acredite las actuaciones realizadas: certificados de mantenimiento, informes de incidencias, contratos firmados o listas de comprobación. Si no puedes aportarlos (o si están incompletos, desactualizados o mal archivados) puede parecer que no hiciste el trabajo, aunque sí se haya realizado correctamente.

Cómo protegerse:

  • Conserva toda la documentación técnica y legal durante al menos 5 años, como exige el RIPCI.
  • Centraliza tus documentos en un software con trazabilidad y copias de seguridad automáticas, que te permita localizar cualquier documento en segundos
  • Evita el uso de plantillas manuales o formatos en papel, ya que se extravían fácilmente y no ofrecen prueba fiable ante terceros.

Una buena gestión documental no solo protege legalmente a tu empresa, también refuerza tu profesionalidad frente a clientes e inspecciones.

8. Cómo cubrirte legalmente ante incendios en instalaciones como empresa mantenedora

Si ocurre un incendio en una instalación que tu empresa mantiene, puedes verte implicado aunque no seas obviamente el responsable del siniestro. El cliente, su aseguradora o incluso la administración pueden cuestionar si el sistema de protección contra incendios funcionaba correctamente, si las revisiones estaban al día o si se informó de deficiencias no subsanadas.

En este tipo de situaciones, la documentación técnica y las comunicaciones previas son fundamentales para demostrar que la empresa mantenedora actuó conforme a la normativa.

Cómo protegerse:

  • Conserva todos los informes, certificados y comunicaciones relacionados con las revisiones y propuestas de actuación.
  • Documenta por escrito cualquier recomendación técnica que no fue atendida por el cliente, como reparaciones críticas no ejecutadas.
  • Asegúrate de que tus informes reflejan fielmente el estado real del sistema PCI en cada visita, especialmente si hay limitaciones, accesos bloqueados o zonas no revisadas.

Cuanto más precisa y trazable sea tu documentación, más sólidas serán tus garantías legales ante una reclamación tras un incendio.

¿Cómo aplicar estas medidas para evitar errores legales en tu operativa PCI?

Conocer los riesgos legales a los que se enfrenta una empresa mantenedora de PCI es solo el primer paso. La clave está en implementar procedimientos claros, utilizar herramientas adecuadas y reforzar la trazabilidad de cada actuación.

Si ya cuentas con un sistema digital que te permita controlar informes, firmas, certificados y contratos con trazabilidad completa, estarás mucho mejor preparado para justificar tu trabajo ante inspecciones, auditorías o reclamaciones. Pero si aún trabajas con documentación dispersa, firmas en papel o plantillas poco seguras, estás asumiendo un riesgo innecesario. Si estás pensando en hacer el cambio a papel, te recomendamos nuestro artículo Del papel a lo digital: transforma tu operativa PCI sin errores.

Proteger legalmente tu empresa de mantenimiento PCI en 2025 empieza por tomar el control de tu documentación, de tus comunicaciones con el cliente y de tu operativa diaria.

Cofrai: tu aliado para proteger legalmente tu empresa mantenedora de PCI

Gestionar correctamente todas las obligaciones técnicas y legales del mantenimiento PCI no depende solo de hacer bien el trabajo: también exige documentarlo, comunicarlo y conservarlo de forma rigurosa. Cofrai está diseñado para ayudarte a cumplir con la normativa y proteger tu empresa ante cualquier situación comprometida.

Con Cofrai puedes:

  • Emitir informes de incidencias detallados y normalizados, incluyendo fotos, recomendaciones técnicas y trazabilidad de entrega al cliente.
  • Generar certificados de mantenimiento PCI automáticos según el RIPCI, incluyendo condicionantes si el sistema presenta deficiencias.
  • Definir contratos de mantenimiento con cláusulas legales claras, adaptadas a los riesgos reales del sector.
  • Centralizar toda la documentación técnica y legal con respaldo en la nube, buscador, control de versiones y copias de seguridad automáticas.
  • Tener trazabilidad completa de cada propuesta de actuación: cuándo se detectó, qué se recomendó, qué decidió el cliente y cuándo se notificó.

Además, Cofrai se actualiza con cada cambio normativo (como el RIPCI, el RSCIEI 2025 o la normativa Verifactu), para que no tengas que preocuparte por estar al día. 

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